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¿Perro o bebé? Esa es la pregunta aquí, al menos cuando los amantes de los animales y los amantes de los perros se encuentran en la fase de planificación familiar con sus parejas. La decisión no es fácil … después de todo, hay buenas razones para llevar primero a casa a tu amigo de cuatro patas, pero también para esperar y ver cómo van las cosas con la descendencia. Los siguientes consejos le ayudarán a planificar.
El hecho de que elija primero un perro o un bebé también depende de su situación y experiencia de vida personal. Es diferente si siempre ha tenido perros y está realmente familiarizado con ellos, o si es completamente nuevo en el trato con amigos y bebés de cuatro patas. Una cosa es segura: no se apresure a tomar una decisión.
¿Cuáles son las ventajas de tener al perro primero?
Tener un perro primero y luego tener un bebé puede ser beneficioso. Puede ser más fácil de esta manera, especialmente para las personas que no tienen experiencia con perros. La crianza de los perros y la crianza de los niños no son básicamente tan diferentes; ambas dependen de la coherencia y la claridad. También se dice que los amigos de cuatro patas son tan inteligentes como los niños pequeños de dos a tres años. Si el perro entra primero a la casa, puedes "practicar" con él y acostumbrarte a darle instrucciones claras sin ser grosero y sin enseñarle reglas importantes.
Sin embargo, es importante que no descuide su nariz fría una vez que llegue el bebé. Su crianza no se detiene entonces, y tampoco su amor por ti. Véalo como un ser vivo independiente con sus propias necesidades, no como un bebé sustituto o un "niño experimental". Si prepara bien a su perro para la nueva llegada durante el embarazo, puede funcionar muy bien. Otro punto a favor: se considera que los niños son menos propensos a las alergias y deberían tener un sistema inmunológico más fuerte si crecen con mascotas desde el principio.
Razones por las que el bebé tiene prioridad
A diferencia de comprar un perro, solo se puede planificar un embarazo hasta cierto punto con anticipación. A veces funciona de inmediato, a veces el bebé tarda un poco en moverse. Esto último puede resultar muy estresante para las parejas que desean mucho tener hijos y puede suceder que no tengan la cabeza libre para darle a su amigo de cuatro patas la atención y ocupación que se merece. Además, tener un bebé es un gran ajuste para cada pareja, es una situación completamente nueva con la que solo puedes sentir empatía cuando ya estás en medio de ella.
Además, un ser humano tan pequeño es siempre una bolsa de suerte: ¿está bastante tranquilo o nervioso? ¿Duerme toda la noche o sigue despertando por la noche? ¿Es bueno, agradable y cooperativo? ¿O se trata de confrontación, probar sus límites una y otra vez y reaccionar desafiante cuando no se sale con la suya? Los padres solo saben todo esto cuando el niño está realmente allí. Existe un gran peligro de subestimar la situación de antemano, ya que reaccionarás de manera diferente y te comportarás con más sensatez si has descansado bien y puedes pensarlo en paz. Todo esto habla a favor de tener el bebé primero y ver cómo se desarrolla y cómo se lleva uno. Y si todo va bien y el niño ya no necesita toda la atención, puede elegir un perro junto con la familia.
Conclusión: ¿perro o bebé primero? Decisión difícil
Al final, depende de usted decidir si su perro o su bebé serán lo primero. En principio, también es posible tener un perro y un bebé al mismo tiempo. Por ejemplo, si queda embarazada de forma no planificada y ya se ha decidido por un perro, es posible criar a ambos juntos. Pero es una doble carga que puede resultar muy agotadora.
Es un poco más fácil si tiene experiencia tanto con perros como con bebés, por ejemplo, como tía, padrino, primo o niñera, para que pueda evaluar un poco qué esperar. Además, pregunte a sus amigos o familiares si puede contar con su apoyo si todo se vuelve demasiado para usted.
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