cuidado dental
El sarro en los perros se debe principalmente a bacterias. Los depósitos desagradables pueden tener diferentes causas. Así es como se desarrolla la enfermedad de los dientes.
Suele comenzar con placa: las causas del sarro en los perros son los depósitos en los dientes, en los espacios interdentales y en la línea de las encías. Las bacterias también juegan un papel en la formación de sarro en la mayoría de los casos. Esto se ve favorecido aún más por los residuos de alimentos, especialmente cuando el cuidado dental es insuficiente. Los componentes de la saliva y las escamas desprendidas de la mucosa oral también contribuyen a la formación de placa.
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Si los dientes del perro no se limpian a diario, las sales minerales de la saliva se depositarán en la superficie rugosa de esta capa. Con el endurecimiento de esta capa, el sarro se desarrolla en el perro.
Otra causa clásica es la salivación insuficiente en la boca del amigo de cuatro patas. Los perros pequeños con hocico corto, en particular, sufren de esto, porque esto hace que los animales jadeen más que los más grandes. Si no hay suficiente saliva en la boca, es más fácil que las bacterias se asienten. La saliva limpia los dientes de los restos de comida.
Otras posibles causas
La dieta incorrecta es otro desencadenante de la acumulación de sarro en los perros. Demasiada azúcar, por ejemplo, es muy poco saludable y, sobre todo, perjudicial para los dientes. El azúcar estimula la multiplicación de bacterias en la cavidad bucal, lo que a su vez puede provocar placa y sarro. Demasiada comida húmeda y muy poca comida seca también pueden dañar sus dientes porque hay muy poco desgaste de los dientes. Esto significa que los dientes no pueden limpiarse lo suficiente por sí mismos.
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